Marco Rubio, Secretario de Estado de Estados Unidos, manifestó a mediados de esta semana que los miles de venezolanos que perderán el amparo migratorio conocido como Estatus de Protección Temporal (TPS) pueden solicitar asilo en la unión americana.
Dicha manifestación la hizo el alto funcionario estadounidense pocas horas después que el Tribunal Supremo diera el visto bueno a la idea Donald Trump, de revocar el TPS a cerca de 350.000 venezolanos que quedarían sin amparo y en las puertas de la deportación.
«Ahora, las personas que han recibido el TPS solicitarán el proceso de asilo. Y creo que muchas de ellas, si no la mayoría, tendrán solicitudes de asilo muy creíbles», declaró Rubio durante en la Cámara de Representantes estadounidense. El actual secretario de estado del presidente Trump, fue un gran defensor del TPS y muy crítico con el Gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela, a su paso por el senado.
Rubio acusó también a la Administración de Joe Biden (2021-2025) de haber entregado el TPS venezolano de manera generalizada y sin revisar adecuadamente los antecedentes de los peticionarios. El secretario de Estado dijo que «por supuesto» que la mayoría de venezolanos con TPS no son criminales, pero señaló que algunos sí lo son. «Si mil de ellos lo son, tenemos un gran problema en los Estados Unidos».
FUERTES CRÍTICAS
La decisión del Gobierno de Trump de acabar con el TPS ha sido criticada por EL Partido Demócrata, defensor de los migrantes y por casi la mayoría de la comunidad venezolana en Estados Unidos, quienes afirman que de ser deportados a Venezuela sufrirán grave peligro para sus libertades civiles e inclusive para sus vidas. El TPS es un programa migratorio creado en 1990 con el que Estados Unidos concede permisos de forma extraordinaria a inmigrantes de naciones afectadas por conflictos bélicos, desastres naturales, epidemias u otras condiciones que no hagan seguro el retorno de los nacionales a sus países de origen.